Había una vez un alma sabia, preciosa, valiente, tenaz, amorosa, protectora, rebelde, inteligente, emocional, cerebral, con la combinación perfecta de aspectos femeninos y masculinos, observador enfocado en la acción, un maestro, un ser despierto, con un sentido profundo de los valores humanos, un ariano con ascendente escorpiano y medio cielo canceriano, autónomo, independiente y libre pensador, creativo, expresivo, plástico y firme a la vez, orgulloso y humilde a la vez, con un sentido del humor increíble, fiel a sus principios y a sus afectos, defensor de los valores humanos, todo un dios hecho hombre. Este hermosa alma me eligió como madre hace 11 años. Un gran desafío y una gran responsabilidad me dio el tata. Me llevó muchos años aprender a orientar a un ser tan entero. Pero como todos somos aprendices y maestros, aprendimos juntos uno del otro. Nos transformamos uno al otro para dejar entrever nuestra esencia. Llegamos a una alquimia tan importante...que el universo comenzó a reflejar nuestro trabajo. Pudimos ver como todo se iba transformando con el movimiento que cada uno hacía. Nos reconocimos en el otro. Nos amamos.
Feliz Cumpleaños hijo.
Mamá Mariana
28/03/2014
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